Las primeras veces que tomé el timón, me recordó a cuando aprendí a conducir. Me senté por primera vez al volante de un coche y me pregunté cómo diablos iba a poder manejar todo a la vez: la dirección, el control de los espejos, los frenos, el embrague, el cambio de marchas, mirar la carretera, mantener una conversación y maquillarme (es una broma 😋). Cómo se las arreglaba la gente para conducir sin esfuerzo consciente era un completo misterio. Sin embargo, muy pronto, y con la práctica, todo se fue arreglando.
Es algo parecido a lo que ocurre con el timón de un barco. Al principio es totalmente abrumador. ¡No sólo hay que gobernar, sino que hay que mirar el compás , la dirección, las olas, el viento, la veleta, la escora del barco, las velas, las balizas, otros barcos ...! Al principio, incluso cuando sólo intentas gobernar en línea recta, estás en todas partes, pero, al igual que con la conducción de un coche, cuanto más tiempo y experiencia adquieras, más automático será. Veamos algunas técnicas básicas.
Los fundamentos del timón del barco Toma conciencia de tus sentidos. Busque y sienta que el barco se escora (más o menos) Siente la dirección del viento sobre tus orejas Escucha el aleteo de las velas Siente la presión en el timón Todo esto indica que algo está sucediendo y que es necesario un ajuste.
El tema principal de nuestra conversación de hoy ha girado en torno a desentrañar parte de la mística que subyace a los viajes por el entorno marítimo y costero, y cuantas más herramientas pueda coger la gente y utilizar para ayudarles a entender ese entorno, mejor. Herramientas como la aplicación Savvy Navvy y la información que proporciona son increíblemente útiles para ayudar a la gente en ese viaje. Pruébalo gratis Cuando intentes dirigir un rumbo, no te pases el tiempo mirando la brújula. Esto no ayudará, ya que, a diferencia de un coche, las fuerzas del viento y las olas te desvían constantemente del rumbo. Acabarás compensando, dirigiendo a derecha e izquierda, y navegando en zigzag.
Tus compañeros tampoco te lo agradecerán porque acabarán mareados. ¿Lo mejor que puedes hacer? Elegir un punto por delante (ya sea un punto de referencia, o incluso una nube) y apuntar hacia él. Si te desvías del rumbo, tus sentidos te lo dirán y sabrás lo que hay que hacer para corregirlo. Pronto se convertirá en algo natural. También es bueno tener en cuenta que si alguien a bordo se siente mareado, lo mejor que puede hacer es tomar el timón.
Darles algo en lo que concentrarse (en lugar de dejar que se obsesionen con lo mal que se sienten) alivia la sensación de malestar casi inmediatamente.